Quiero despertar contigo

Quiero despertar tu amor contenido,
Tu felicidad prolongada.

Quiero ser el brillo de tus ojos,
 Quiero ser el resplandor que ilumine tu rostro,
 Quiero ver mi silueta estampada, En la profundidad de tu mirada. Quiero regalarte mi alma, Mi tiempo, 
Quiero llenarte de alegrías, De colores tu entorno.
Quiero verte sonreír, Sonreír de amores, 
Sonreír de alegrías, Sonreír de felicidad.

No quiero que estas palabras sean solo papel y tinta,
Quiero convertirlas en realidad,
En caricias constantes,
En momentos imborrables,
En gestos estampados en tu memoria.

Te prometo lealtad,
Te prometo mi tiempo,
Te prometo amor incondicional,
Te prometo vivir para ti,
Para embellecer tu estadía en este mundo,
Para que conozcas el verdadero amor,
Para que conozcas el querer sincero.

Quiero sentirte mío,
Quiero ser el motivo de tus pensamientos,
Quiero ser quien cuida y acompaña tus sueños,
La luz que brilla en tu soledad,
El remedio que cure tus angustias,
Quiero ser yo quién aleje tus penas,
Quien acompañe tus pasos.
Quiero ser yo,
Solo yo,

Pero contigo

Voy a Besarte, Amor...


Voy a besarte, Amor...
voy a darte toda mi ternura,
y en mi beso te entregaré mi vida;
borrando de tu corazón toda melancolía.
Voy a abrazarte, Amor...
escucharás en silencio lo que siento,
te arrullaré en mis brazos,
se esfumará tu tristeza en un momento.


Te acariciaré la frente...
te diré, mirándote a los ojos... "Te Amo",
déjame expresarte todo mi sentir;
porque eres la luz en mi vivir.
Voy a besarte, Amor...
deja que tus lágrimas broten,
deja que arranque ese dolor;
deja que el mundo sea solo tuyo.

Amor...

si tu vida es un tormento...
quiero compartirlo contigo,
lloraré contigo sin llorar;
y lloraré contigo llorando.

Déja que tu soledad sea mía...
apoyate en mis amorosos labios,
yo soportaré la carga de tus días;
bésame y deja en mi cuerpo tu agonía.

Voy a besarte, Amor...
mis besos calmarán tu pena,
y si no quisieras mis besos;
a tu lado estaré,
esperando que tu quieras.

PIROPAZO, Miguel Reyes


Hunde un cuchillo marinera,
hasta el sentido,
para saber por quien suspira el corazón mío.
Como un pozo ama al patio
y la lluvia a las macetas,
como un viento y otro viento a una veleta.
Como la iglesia a los fusiles
de los cobardes,
como un pobre a un pobre perro
para que le ladre,
como un mar a un vaso de agua
o el grito al abismo,
como el cielo a las desgracias,
como un cura al catecismo.

Como la brisa de agosto a las persianas,
como un manto de caricias a los pasillos,
como pueden los fulanos a las fulanas,
como un nido de secretos a los pestillos.

Como un chivo a la legión,
como Dios a un huracán,
como un preso a una ilusión,
como el ruido a la soledad.

Como un barco al horizonte,
como el loco a su cordura,
como un hombre a otro hombre,
como el norte solo al norte,
como el torito a la luna.

Como el hambre a los chiquillos,
como un cojo a una mentira,
como el miedo a lo prohibió,
como el sexo a los gemidos,
como la muerte a la vida.

Como un tonto a un san benito,
como el frío al mes de enero,
como el nudo a la corbata,
como el rey al monedero.

Hunde el cuchillo marinera
a ver si muerto ya te enteras,
nadie habrá que así te quiera,
así como yo te quiero.

Miguel Ángel Reyes

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