Arrepentimiento, soneto


Aquellos tiempos idos.

No puedo imaginar aunque lo intento
donde estén las caricias que te hice,
ni los ratos que en ti me satisfice;
parece ser volaron con el viento.

Para nada sentí lo que ahora siento,
que entonces por tu amor yo me deshice
y pido a Dios de nuevo cristalice,
por vivir repetido aquel momento.

Fueron tiempos de enormes emociones
merced a la pasión y la dulzura
que pusimos. En grandes atracones

de besos, de caricias, de locura
terminamos por todos los rincones,
pues nunca conocimos la mesura.
Arrepentimiento.

Malhadados aquellos tiempos idos
en que, niño, sentí grandes anhelos
de cazar pajarillos sin repelos
en momentos que estaban distraídos. 

Gurriatos escapados de sus nidos,
alegres y felices en sus vuelos,
novatos, que no tienen los recelos
de aquéllos que ya fueron perseguidos.

Me pesan tales hechos como losa
y sufro cuando vienen a mi mente,
pues creo que es una acción muy vergonzosa

por más que la practique mucha gente
y aunque sea un pajarillo poca cosa,
no siento que me sirva de eximente.

Cristino Vidal Benavente

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger... Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...