Caminando hacia el abismo.-Capitulo 14.- Luchando por su vida.

Capitulo 14.-

Luchando por su vida.-

Pasó quince días sin que me permitieran ver a Pedro, por fin pude hacerle una breve visita y parecía un viejo, las manos le temblaban y sus piernas difícilmente le respondían, más que hablar balbuceaba motivado según el celador por la mucha medicación que recibía, su doctor declinó amablemente recibirme argumentando que Pedro necesitaba aislamiento y que no tendría otro permiso de visita, hasta no pasado otros quince días en el que esperaba estuviera más recuperado, quería ir bajando la medicación progresivamente para ver como respondía, hasta entonces tenia restringida todas las visitas, solo me permitió verlo a mi sabiendo la unión que había entre nosotros. 

Para mis adentros me dije, Te has salvado de nuevo Pedro, ¿cuando conseguirás tus propósitos?, yo tenia claro que de seguir así de enganchado lo volvería a intentar, por que conozco su forma de pensar, se odia a si mismo por haber caído tan estúpidamente en ese abismo tan difícil de salir y en esta ocasión seria mucho más difícil para el después de un nuevo fracaso.

Se que hasta que Pedro no consiga entender las palabras que en cierta ocasión le dije, no saldrá victorioso de esta ardua empresa que tiene que tomarse muy en serio. Le dije que lo primero era tener el objetivo claro, en esto no se puede decir, ¡lo voy a intentar¡ si se dice eso ya ha fracasado, tiene que pensar en un largo camino a recorrer y que puede hacerlo sin prisas, paso a paso con el objetivo puesto siempre en esa meta que se ha planteado...

En una ocasión le dije, Pedro, solo tienes que recordar aquellos momentos en los que no necesitaba de las drogas para moverte, intenta sentir esos tiempos donde tenias tu vida llena de logros sin la miseria a la que te somete y sobre todo hazte una reflexión, si has pasado treinta años sin consumir drogas, que te va a impedir ahora recuperar esos momentos y de nuevo poder vivir una vida plena.

Entiendo lo que me dices Ángel, pero es tan difícil...claro que es difícil, solo tienes que plantearlo como un largo viaje, puede que te parezca lejano si quieres ir andando desde Sevilla a Roma, pero si sabes y tienes claro que tu objetivo es llegar, nada ni nadie te impone el tiempo que tardes, un día haces tres km, otro cinco y sin correr puede que no te des cuenta que en un año has llegado a tu destino sin cansarte y sin traumas...el salir de la droga es una carrera de fondo que tienes que tener el convencimiento que vas a ganar por que te va la vida en ello...

Ahora recordando esto he pensado que aunque me dijo que lo entendía, parece que no fue del todo así, aunque su verdadero problema es el de no haber pedido ayuda aún en un centro de los que hay de ayudas a toxicómanos, cuando salga del hospital lo convenceré pues será la única forma en la que podría conseguirlo al tener una atención continua de psicólogos, médicos y lo más importante, la metadona que pueden rebajarte progresivamente para que llegado un momento no la necesites...

Limpiarse definitivamente de la droga no es sustituirla por la metadona de por vida, porque entonces estarás física y psicológicamente enganchado por siempre, el verdadero objetivo tiene que ser utilizarla como terapia reduciendo el porcentaje hasta que un día te encuentres que no la necesitas más. Es esa la meta que tienes que plantearte y seguro tu vida volverá a ser la que era...

Procuraré que asista al centro de desintoxicación donde puede pasar la mañana ocupado en alguna formación que aunque el no la necesite, es una buena forma de estar alejado de las calles y sentir que está haciendo algo por su vida. En esos centros puedes desayunar, comer y tomarte tu medicación antes de irte...no se si soy demasiado optimista, pero ahora pienso en Pedro después de haberse puesto en la recta hacia la recuperación y yo con el en un teatro viendo, ¡La Estupidez¡, una obra del autor argentino Rafael Spregelburd que versa sobre la fragilidad de la inteligencia en los tiempos que corren. Aunque se me hace, que esa estupidez es tan antigua como el hombre...

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Ángel Reyes Burgos

Más que enamorado...

Que jamás acepto un “no” y soy como un niño.
Que suelo ir de regreso cuando hay que partir.
Reiterado e irreflexivo puñado de sinsentidos:
¡Te Amo!... y estoy más que enloquecido por ti.

Que acostumbro a extrañarte por todo motivo.
Que en tu ausencia ya no entiendo como vivir.
Fanático, incondicional y devoto de tu cariño:
¡Te Amo!... y estoy más que necesitado de ti.

Que me acuesto y amanezco con tu imagen.
Que procurar tu felicidad es mi esencial fin.
Hidalgo, leal, y tu gozo, mi noble estandarte:
¡Te Amo!... y estoy más que pendiente de ti.

Que te siento como en la existencia he sentido.
Que soy simplemente tuyo desde que te conocí.
De tus pasos se alimenta mi encantado camino:
¡Te Amo!... y estoy más que enamorado de ti.

Ciclo San Valentin

(Fabián Ruiz)

Caminando hacia el abismo.- Capítulo 13.- En el abismo.

Capítulo 13.-

En el abismo.-

Al llegar al hospital, le hicieron un lavado de estómago, lo entubaron y después de dos horas lo subieron a la última planta del hospital Virgen del Rocío donde está la unidad psiquiátrica, yo hable con el médico, pero no pude decirle nada, pues no sabía lo que se había tomado, aunque los paramédicos que lo recogieron en la cuneta encontraron a su lado un bote vacío de trankimazin y una botella vacía de vino. Era ya el segundo intento de suicidio y me advirtió que pasaría mucho tiempo antes de que se atreviera a darle el alta...

Yo nada podía hacer ya en el hospital y me fui a descansar a casa, sin darme cuenta, unas lágrimas de intenso dolor hicieron aparición en mis ojos y tuve que parar el coche porque no veía bien la calle...
Me costó mucho dormir, hice lo que mejor se hacer para compensar esos momentos en los que siento que caigo en un pozo sin luz y me pierdo en la negrura...recurrir a mis recuerdos...

Ya hice referencia a que mi madre estaba trabajando en la casa cuna en dos funciones, una la de ama de cría y otra de costurera y maestra de costura de las niñas.

A mi me encantaba por la tarde cuando terminaban las clases irme con ella, quizas me encantaba por que aprendiendo costura estaba esa niña que ocupaba todos mis pensamientos. Le pedía un trapito a mi madre, hilo, aguja y me convertía en una niña mas, dando puntadas que mi madre corregía si no estaban bien dada, pero el que no estuvieran bien dadas no era culpa mía, mis ojos estaban más tiempo en esos ojos negros de la princesa que tenía enfrente y como no podía ser menos, mis dedos estropeaban el trapito que mojaba continuamente de sangre por los pinchazos, mi madre me decía, deja de mirar a la niña que te vas a desangrar...

Pero cómo no mirarla, si desde los dos años había suspirado tanto por ella que el pecho lo tenía inflado como un palomo, como no mirar a esa cara tan graciosa sobre todo cuando iba a dar una puntada sobre su telita y sacaba esa lenguita rosada a través de sus preciosos labios...y cuando levantaba la mirada para mirarme a mi, desaparecían todos los que había en el costurero, menos mi madre, que tenia que estar pendiente de ella mirándola con otro ojo para que no me cogiera pendiente de mi amor y me quitara el trapito y los utensilios de costura para mandarme al patio...esa era mi verdadera tragedia, que me separaran de su lado, ya tenia yo siete años y ella seis, toda una vida para unos niños que se miraron con una sonrisa desde que se conocieron...

Me había conseguido olvidar de Pedro camino a mi casa con estos pensamientos, mis ojos se habían secado y una profunda paz me invadía, besé la única foto que tenia de mi adorada niña que un día me dio mi madre cuando ya tenia que abandonar el internado a los nueve años para irme con mi familia de Linares a casa de mi abuela Ana y mis titos Antonio y Ana, recordé lo que lloramos el día que nos separamos y en ese momento no supe que jamás volvería a verla. Nunca sentí dolor con esos recuerdos, solo un agradecimiento infinito de haber podido vivir una historia tan hermosa y peligrosa a la vez, de haber tenido que esquivar tantos coscorrones sobre mi cabeza...durante muchos años incluso en el ejercito, cada vez que alguien levantaba el brazo cerca de mi agachaba la cabeza...

Subiendo a mi casa, me prometí que dormiría bien y no dejaría que los tristes acontecimientos de Pedro me causaran insomnio, pero eso es mas fácil decirlo que hacerlo, la luz del amanecer se filtraba ya por las cortinas cuando me quedé dormido...

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Ángel Reyes Burgos

La Sentencia del Justo, Ines de la Cruz

Firma Pilatos la que juzga ajena
Sentencia, y es la suya. ¡Oh caso fuerte!
¿Quién creerá que firmando ajena muerte
el mismo juez en ella se condena?

La ambición de sí tanto le enajena
Que con el vil temor ciego no advierte
Que carga sobre sí la infausta suerte,
Quien al Justo sentencia a injusta pena.

Jueces del mundo, detened la mano,
Aún no firméis, mirad si son violencias
Las que os pueden mover de odio inhumano;

Examinad primero las conciencias,
Mirad no haga el Juez recto y soberano
Que en la ajena firméis vuestras sentencias.
---
Mira antes de juzgar injustamente
la condena a que los hombre tu le impones
si sobre tu conciencia pesan cien ciclones
que giran atormentándote la mente...
Versos añadido por mí.

Antes de juzgar, juzga a tu corazón...

Caminando hacia el abismo.-Capítulo 12.- De nuevo la tragedia.-

Capítulo 12.-

De nuevo la tragedia.-

Sudaba copiosamente cuando empecé a conducir camino de la carretera,  todo me parecía muy irreal al estar a las once y media de la noche en esa situación por una persona que aunque amigo, era totalmente ajeno a mi vida actual, yo me movía en un ambiente distinto entre empresarios y banqueros, clientes de mi constructora y mis obligaciones con los pagos, ¿Que hacía yo metido ahora en ese monumental jaleo?, la explicación solo la tenía el cariño que desde niño nos teníamos y que desgraciadamente me iba a pasar una gran factura personal...

Me quedaba un buen rato de camino y quise relajarme recordando esos buenos momentos que se atesoraban en mi mente de cuando éramos pequeños, tardaba poco en dar con alguno, pues nuestras vidas estaban llenas de anécdotas que recordaba siempre con unas sonrisas por lo gamberro que éramos. Concretamente, recordé una en la que mi preciosa virgen María compañera del portal de Belén, ya era casi una mujer con sus seis años, y otra niña que no recuerdo su nombre, cuando las monjas no miraban, la tomamos de las manos a las dos, urgiéndolas  para que se vinieran con nosotros, era el més de febrero de 1956 y yo a mis siete años era todo un D. Juan, estábamos ensayando la obra de Romeo y Julieta. Yo me cogí un buen berrinche y lloros cuando me pusieron a una niña que no me gustaba como Julieta...pero me gustaba mucho el teatro y siempre iba al ensayo, aunque por otra parte si no iba, me llovían los cosquis en la cabeza de la coscorronera de turno...
Aunque pueda parecerlo, no tengo nada en contra de las monjas, tres tias mias lo son.

Sonreí recordando que una vez a solas en el jardín, ensayé mi papel con mi princesa mientras Pedro tomaba de la mano a su niña improvisando sobre la marcha, pues el papel no se lo sabía, yo solo me acordaba de esto...¡Ya se adelantó el día con veloz paso sobre las mojadas cumbres de los montes¡. Ahora tengo que besarte...en realidad el papel decía, ¡Tengo que marcharme¡... y al ponerle las manos sobre los hombros para besarla, nooo, que somos unos niños,no me puedes besaaaar, mientras se ponía los puños en los ojos como si llorara, solo cuando retiró sus manos vi que estaba llorando de verdad...una coscorronera que andaba cerca la oyó llorar y vino como si esas alas le diera poderes mágicos para volar y llevara escondido dentro de la toca una especie de resorte que le infieren un poder sobrehumano para descargar con tanta fuerza sus nudillos contra nuestras cabezas...los que lloramos ahora éramos Pedro y yo con verdaderas ganas, aquello había dolido como si fueras piedras que nos hubiesen caído del cielo...pero mereció la pena tener tan cerca a mi Julieta con esa carita que era como contemplar el arcoiris después de la lluvia...

Me estaba acercando al punto que me había indicado esa señora y mi cara se transfiguró al sentir el peso de la realidad, quería llegar por ver cómo se encontraba, pero por otro lado prefería no saber nada...no podía dejarlo tirado allí en medio de una carretera secundaria tan triste como una vida absurda como la que Pedro a elegido vivir, aunque no creo que nadie elija ese modo de vida, pero si se la buscan por la irracionalidad de sus actos.

Pedro no respondía a mis constantes empujones sobre sus hombros para que despertara, comprendí que no estaba drogado por heroína, seguramente se había atiborrado de trankimazin, unas pastillas que con demasiada ligereza recetan a los drogadictos para dormir y que la utilizan para no sentir el mono y quedarse dormidos, pero en tal cantidad que a veces le produce un fallo cardiaco... 

No podía hacer nada por el salvo llamar a urgencias para que le hicieran un lavado de estómago...
mi noche aún no había terminado...Le dí treinta euros a la prostituta para que se buscara la vida lejos de allí mientras llegaba la ambulancia, pues con ella llegaría la policía...y mi noche apenas empezaba.

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Ángel Reyes Burgos

Reflexiones de amistad y amor...

La vida es como tú la quieras hacer, nada es fácil, siempre nos encontramos con nuevos retos, y cada día es una aventura.
La vida muchas veces nos golpea tan fuertemente que hasta nos cuesta abrir los ojos por la mañana, pero en nosotros mismos está el poder hacer de nuestra vida algo bonito u optar por no revertir las cosas que nos salen mal. Siempre hay cosas por las que vale la pena seguir soñando, porque eso nos hará felices.

Si por el motivo que sea la persona con la que habías soñado y hecho planes se ha marchado de tu lado, ser feliz no será fácil para ti. En una situación así lo único que se desea es llorar y no volver a ver la luz del día.

Pero detente un momento y piensa: Le has conocido, no naciste a su lado; por lo que si ya no está junto a ti es porque el amor que decía tener por ti no era tal. Debes pensar con la mente fría, hay que saber cerrar ciclos y dejar atrás lo que te hace daño. Por nuestro bien debemos seguir adelante, pues nadie está obligado a querernos para siempre.
La vida es y será siempre bella, no te dejes angustiar por las cosas cotidianas, siempre habrá razones para querer vivir, una persona no puede ser todo lo que esperas. Mira a tu alrededor, hay mucha gente buena que siempre estará dispuesta a darte una mano cuando las tuyas no te alcancen, alguien siempre está contigo, sólo que no te das cuenta porque te has encerrado en su mundo y te olvidaste de que tienes uno propio.

Te conoces, ya sabes como eres, concédete la oportunidad de volver a querer, y seguro que con esa felicidad que irradias acercarás a muchas personas que tendrán ganas de compartir tus sueños, y porque no, puede que incluso tu amor. Disfruta cada momento de tu vida, porque son únicos, nunca habrá un día igual que el otro, disfruta de las maravillas que hay en la creación. Muchas personas se quedan tristes y amargadas por no mirar más allá de sus propias frustraciones, no seas de esas personas, aprovecha tu vida, vívela plenamente pues sólo se vive una vez.

Tu pareja jamás debiera ser el centro de tu universo, debemos aprender a vivir nuestras propias vidas, sin necesitar de esas "muletillas". Piensa en positivo, piensa que eres grande, que todos los planes con los que un día soñaste podrías llegar a realizarlos. Eres una persona única, no te aferres a cosas que no son para ti, no dejes que se te vaya la vida pensando y tratando de recuperar lo que has perdido, piensa mejor en lo que has ganado.

Caminando hacia el abismo.-Capitulo 16.- Un nuevo comienzo.



Capitulo 16.-

Un nuevo comienzo.-

Me han llamado del psiquiátrico del hospital Garcia Morato para autorizarme una visita a Pedro, me alegré al verlo por el cambio tan drástico que había sufrido, estaba mas gordo y se le veía radiante por verme y un atisbo de esperanza se instalaba de nuevo en mi alma, ese alma de la que me hizo desligarme el comportamiento de los religiosos y sus religiones, pero de la que no quería renegar por miedo a un castigo divino...aunque de todas formas, ya estamos bastante castigados con las miserias que tenemos que contemplar en este mundo de fieras donde la mas sanguinaria es nuestra especie...

Volví a la oficina contento y esperanzado por el, pero sin echar las campanas al vuelo, ganar la guerra contra las drogas requiere antes haber perdido muchas batallas y solo la gana quien sabe eso y no se rinde jamás. dentro de mi me dije, ojala seas tu uno querido amigo...

Tenia que terminar un presupuesto en la oficina de un edificio en Burgillos que me resultaba interesante y que me recordaba a los zigurat del antiguo Egipto, por su formación escalonada, aunque yo le llamaba el titanic por su forma de barco...

Mis pensamientos no dejaban de girar en torno a Pedro y su situación, aunque le dijera que si caía de nuevo no contara conmigo, en la practica no podía moralmente hacer eso, solo en las situaciones difíciles es cuando hay que poner toda la carne en el asador para ayudar a un amigo por mucho que nos cueste y se que esta andadura será complicada, pero si le estoy pidiendo a el que no se rinda, solo con mi ejemplo puedo hacerle comprender que su lucha es mi lucha...

Pero el presupuesto no lo terminé, mi mente permanecía anclada en los recuerdos, esos que me alegran el alma y me alejan de las miserias de la vida, aunque últimamente esas miserias se limitaran al gran problema de mi amigo Pedro...

Recordaba que cuando volví de Linares, el estaba en la Escuela de formación profesional Virgen de los Reyes, para mi fue una gran sorpresa y mayor alegría, no lo veía desde los nueve años que salé de la casa cuna y teníamos ya once años...no se si fue algo bueno o malo, pero eramos la pareja zipi y zape, esa de los cómic que estaban siempre haciendo travesuras. Nos escapábamos continuamente del colegio, unas veces para buscar pajaritos en los nidos de las azoteas que hacían en los desagües.  

Otras veces nos íbamos a una vaquería propiedad de la diputación regentada por el mismo director del manicomio que tenia una hija que me quitaba el sentido, mientras me alejaba con ella a través de los naranjos, Pedro hacia de vigía por si se acercaba el padre, pero mal vigía tenia que ser, porque más de una vez, me sentía cogido por la oreja, mientras Laurita andaba de puntillas por la fuerza con que el padre la levantaba de otra oreja mientras decía, papi papi, me dueleeee...

En una ocasión, el padre cuando me vio llegar por el sendero, soltó del establo una vaquilla, me quité el chaleco y a modo de muletilla me dispuse a torearla, no era más grande que un san bernardo, pero como venia tan rápida, antes de llegar a mi altura salí corriendo hasta que me arrinconó contra el muro de una alberca de agua para los animales, y en lugar de torear, me di un buen chapuzón hasta que se fue...mis días de torero habían terminado definitivamente antes de comenzar...

En la oficina no había podido terminar el presupuesto perdido como estaba en mis recuerdos y después de cenar me puse manos a la obra, me quedé dormido en la mesa de trabajo, me despertó el sonido del teléfono, era las dos de la madrugada, me sobresaltó y más cuando me dicen que es del hospital, sin muchos rodeos me dicen que Pedro ha muerto...

Me estoy vistiendo con lagrimas en mis ojos y la puerta de mi cuarto se abre, entre las luces que hay detrás suya procedente del salón, su figura se recorta, la luz de mi lampara de trabajo se refleja en unos ojos muertos dentro de unas cuencas hundidas y una piel pegada a los huesos de su cara, me deja aterrado, tu, tu, tu...me acaban de llamar diciendo que estas muerto, oigo mis propias palabras mientras despierto de esa pesadilla que se apoderó de mi sueño...respiré tranquilo al saber que no había pasado nada, Pedro estaría bien...

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Ángel Reyes Burgos

Hermoso fragmento de la obra, Romeo y Julieta...William Shakespeare

Romeo:- ¡Silencio! ¿Qué resplandor se abre paso a través de aquella ventana? 
¡Es el Oriente, y Julieta, el sol! ¡Surge, esplendente sol, y mata a la envidiosa luna, lánguida y pálida de sentimiento porque tú, su doncella, la has aventajado en hermosura! ¡No la sirvas, que es envidiosa! Su tocado de vestal es enfermizo y amarillento, y no son sino bufones los que lo usan,.

¡Deséchalo! ¡Es mi vida, es mi amor el que aparece!… Habla… más nada se escucha; pero, ¿qué importa? ¡Hablan sus ojos; les responderé!…Soy demasiado atrevido. No es a mi a quien habla. 
Las más resplandecientes estrellas de todo el cielo, teniendo algún quehacer ruegan a sus ojos que brillen en sus esferas hasta su retorno. ¿Y si los ojos de ella estuvieran en el firmamento y las estrellas en su rostro? ¡El fulgor de sus mejillas avergonzaría a esos astros, como la luz del día a la de una lámpara! ¡Sus ojos lanzarían desde la bóveda celestial unos rayos tan claros a través de la región etérea, que cantarían las aves creyendo llegada la aurora!… 

¡Mirad cómo apoya en su mano la mejilla! ¡Oh! ¡Mirad cómo apoya en su mano la mejilla! ¡Oh! ¡Quién fuera guante de esa mano para poder tocar esa mejilla!

Julieta:- ¡Ay de mí!

Romeo:- Habla. ¡Oh! ¡Habla otra vez ángel resplandeciente!… Porque esta noche apareces tan esplendorosa sobre mi cabeza como un alado mensajero celeste ante los ojos estáticos y maravillados de los mortales, que se inclinan hacia atrás para verle, cuando él cabalga sobre las tardas perezosas nubes y navega en el seno del aire.

Caminando hacia el abismo.-Capítulo 11.- ¿Sueño o realidad?

Capítulo 11.-
¿Sueño o realidad?

He hecho referencia en este libro al detalle de no saber algunas veces si mis recuerdos son provocados por la reiteración de mi madre a contarme las cosas de pequeño, pues dudo mucho que después de sesenta años esos recuerdos sean de mi mente, pero hay un detalle que me hace pensar que son mis propios recuerdos, pues hay cosas que jamás le conté a mi madre para no hacerla sufrir y aún así, las recuerdo como si fuese hoy cuando ha pasado...

No se con que me puse enfermo a los cinco años, una enfermedad infantil que casi todos los niños de la casa cuna pasamos y que me tuvo en cama una buena temporada. Nos aislaban en una habitación con unas ventanas casi a la altura del techo, un simple rectángulo arriba que me pasaba mirando horas enteras quizás con el deseo de salir volando por ella y salir de esa agobiante habitación.
Las mañanas se me pasaban rápidas entre las visitas del médico y las monjas, pero después de comer eran aterradoramente largas y tristes hasta la hora de la cena. Se que tenia mucha fiebre porque estaba ardiendo, sentí como mi sabana flotaba en el aire y yo con ella y al caer de nuevo sobre la cama, vi a mi madre a los pies conmigo embrazo y con un mechero me quemaba la cara...por supuesto eso nunca pasó, era producto de la fiebre tan alta que tenía...jamás se lo conté a ella,
¿Porque nunca se me olvidó?...

De joven he leído algunos libros tan extraños como, El tercer ojo,  La túnica azafrán o Una luz en la oscuridad de Lobsang Rampa, intentaba encontrar una explicación a mis sueños y también ejercitarme en la relajación, uno de los ejercicios consistía en estar tumbado sobre la cama y vaciar la mente por completo a la vez que te concentraba desde los pies hasta la espalda para bloquear los nervios que transmite la sensación del tacto de la piel, al cabo de muchos días intentándolo, empecé a sentir como si flotara de verdad sobre la cama y una sensación de libertad pasmosa...es muy parecido a los sueños que tenemos en los que volamos, pero esto de forma consciente...

Eso me hizo recordar a mi niñez cuando por las fiebres flotaba mi sábana sobre la cama y yo con ella.
Pero no me dió ninguna explicación de porque veía a mi madre frente a mí tomándome en brazo y quemándome la cara...Tuve durante muchos años pesadillas con eso...

Otra de las cosas que mi madre nunca contaba, era aquella vez que cerró una cancela de hierro a mi paso, con tan mala fortuna que yo estaba agarrando el marco y me aplastó el dedo gordo de la mano izquierda, me dejó una buena cicatriz y perdí la uña que nunca se recuperó del todo, a lo largo de mi vida jamás hemos mencionado eso y me pregunto, ¿como lo recuerdo con tanto detalle incluso la cancela en la que me hice esa lesión, que he visitado de mayor cuando voy allí...

En otro capítulo he hecho referencia a esas cicatrices que tengo sobre todo en la cabeza, pequeños recuerdos de los golpes que me gané por mis travesuras, pero tengo una buena cicatriz en la rodilla derecha que me la hice solo en el jardín corriendo a gatas detrás de un gato, un trozo de vidrio se me incrusto haciendome una verdadera carnicería, pero no seria la ultima vez que lo haría...

Cuando me siento melancólico me da por recordar cosas de mi infancia, aunque no sean del todo agradable si me hacen sentir que siempre he estado muy vivo y quiero seguir estándolo si los acontecimientos no pueden conmigo...

En ese punto de mis pensamientos suena el teléfono...una voz femenina que no conozco pregunta, ¿Es usted Ángel Reyes?, le contesto que si, usted quién es ¿la conozco?...No me conoce, estoy trabajando en la carretera de prostituta y junto a mi he encontrado en la cuneta a un señor que tenía en el bolsillo una tarjeta suya, no lo veo bien, pero yo no puedo llamar a la policía porque me conocen de trabajar aquí y no quiero que me encierren o me pongan una multa, si es amigo suyo procure recogerlo o llamar a una ambulancia. Ok señorita muchas gracias, quédese junto a el hasta que yo llegue, le pagaré por lo que deje de ganar en este tiempo...

Al coger las llaves de mi coche la tiré con rabia contra el sillón, ¡maldito cabrón¡, que te jodan, ya te lo advertí y mira como has terminado de nuevo...sentí una punzada en ese alma que parece tenemos y tomando de nuevo las llaves me puse la chaqueta y me fuí a la calle...sería una larga noche...

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Ángel Reyes Burgos

¿No sabes que regalar en este San Valentin?...

El amor es cosa seria
aunque produzca dolor
cuando sus espinas pinchan
tan dentro del corazón...

Aunque la rosa es hermosa
tiene en sus ramas prendidas
al acecho las espinas
del tallo más dolorosa...

Pero como no arrancar
de la tierra esos primores
aunque pronto a claudicar
son flores de los amores.
Que mujer no se le ablanda
con ternura el corazón
cuando dos rosas le hablan
con roja flor de pasión.

¿Que no sabes que regalar
en este San Valentin?
puedes intentarla besar
con una dulzura sin fin.

Que las espinas no pinchan
en el pecho de tu amante
si del tallo tu las quitas
con tus besos al instante...



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