con mis letras de poeta apasionado,
no olvidé que de amor tenia heridas
y me sentia de tu amor abandonado.
Fui la alegría de tu vida, un ruiseñor
que con sonrisas eternas saludaba tus días,
tu una veleta que por fin giró
dejando mi alma, desierta y sombría..
Con mis versos de amor y sentimientos
fui el alimento de tus alegrías,
sin ningún dolor y arrepentimiento
te fuiste en silencio, con mis fantasías.
Esas, que se tejen cuando hay amor,
esas que el alma fabrica, con toda ilusión,
esas mismas que con el mayor dolor
te dejan en pedazo la vida, y el corazón.
Yo guardé las ilusiones, bajo candados
sin querer que el amor me volviera a alcanzar
no queria de nuevo sentirme enamorado
y que nadie de nuevo, me pudiera dañar.
Pero mi corazón ardiente y apasionado
abrió los candados y se puso a soñar...
Ángel Reyes Burgos
No hay comentarios:
Publicar un comentario