Tarde de recuerdos...Voy paseando esta tarde por los cielos del recuerdo...


Voy paseando esta tarde
por los cielos del recuerdo
y mis alas baten libres,
jugando a favor del viento.

Un suspiro se estremece
en el fondo de mi pecho
y mis plumas lo aprisionan
para que no tenga miedo.

Y los recuerdos afluyen
en corrientes de desvelos
y a distancia los disfruto,
como pájaro en su vuelo,
que contempla desde lo alto
sin querer bajar al suelo.

Recuerdos que son… recuerdos,
son pasado y son momentos,
que este poeta ha vivido,
aunque a veces sean sueños.

Esta tarde de verano
es tarde para paseos
y yo lo hago desde lo alto,
volando entre mis recuerdos.

Todos los derechos reservados.

POETA DEL AMOR

Atraparé los sueños para ti...


Atraparé los sueños para ti
que quiero amarte en el silencio
para que duermas siempre feliz
y sientas cuanto te quiero.

Te abrazaré dulcemente
en el mar de la tranquilidad
en tu boca y en la frente
y hasta en tu alma inmortal.

En la tempestad de tu cuerpo
la tempestad de tu alma
mi tempestad y terremoto
en medio de furia en calma.

Hasta la noche tan fría
se incendiará como el sol
cuando sepa que eres mía
y se incendie tu corazón.

Quiero amarte en las planicies
en los valles y sus vertientes
quiero fundirme en tu vientre
con tu amor eternamente.

Ángel Reyes Burgos 

Tengo un sueño sencillo...

Tengo un sueño muy sencillo
un sueño de enamorado
tomar tu mano en el parque
cuando te sientas a mi lado.

Mirar a esas palomas
del parque de mi Sevilla
y en la glorieta de Bécquer
sentarte en mis rodillas.

Recitarte mis poemas
al atardecer del día
estremecer a tu corazón
si escuchas, te amo vida mía.

Abrazarte por el talle
mientras te beso y te miro
a esos dos luceros tuyos
convertido en mi camino.

Camino por donde entro
en el fondo de tu alma
camino de mi destino
donde te amo y me amas.

Ángel Reyes Burgos 

Dos corazones y una vida...


Se fusionó tu vida con mi vida
en el momento en que te abracé
dos corazones apasionados y locos
uniendo sus vidas por primera vez.

Nuestros cuerpos fundimos en ese instante
el mismo momento en que te amé
y cobijandome en ti sediento y amante
en nuestra barca de amor hacia el cielo remé.

Un viaje infinito estrechando tu cuerpo
nuestros labios unidos en ardiente pasión
el vaivén cadencioso de nuestro amor entregado
regalándonos la vida y el corazón.

Se nos va los sentidos en cada experiencia
en que tu cuerpo y el mío estrechado están
y por unos minutos nuestras consciencias
viajan libres en la eternidad...

Ángel Reyes Burgos 
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