Jamás dormí a tu lado
ni sentí de tus caricias
ni en mi corazón ha quedado
de tu rostro la sonrisa.
Ni pude dormir en tu pecho
ni de la mano cogerte
de mi infancia solo hay sueños
por quererte y no tenerte.
Yo veía a otros niños
de la mano de sus padres
y yo sin luna y sin sol
gemía por abrazarte...
Que largo se me hizo crecer
sin el calor de tus besos
cuando triste al amanecer
solo quedaba el silencio.
Ahora que ya he crecido
y soy un padre de sueños
se lo que yo he perdido,
ya es tarde y no te encuentro.
Si tan solo una vez en la vida
hubieras cogido mi mano,
estas dolientes heridas
en versos, no habría dejado.
Disfruten de sus padre, yo jamás lo conocí.