Sin mancha original, Inmaculada,
así fuiste, María, concebida;
bendito sea Aquel que dio la vida
a la Madre de Dios, glorificada.
Desde antes que nacieras, tu pureza
resaltó entre todas las mujeres,
hoy te ofrezco mi amor, si lo requieres;
bella flor de azahar, sin par belleza.
Los ángeles realzan la hermosura
con bello manto azul y sutil velo,
aunando la beldad y la dulzura.
María Inmaculada, ¡mi modelo!
Por ser Madre de Dios, virgen y pura
un coro celestial te alzó hasta el cielo.
Chelo Álvarez