A solas en la penumbra te tiendes a soñarme
yo que te sorprendo me acerco a besarte
te desnudo de sombras y de soledades
y te visto de caricias, de amor y tempestades.
En tu cuerpo se enciende la pasión desbordada
a mi cuerpo lo vistes con tu piel nacarada
suenan mil trompetas cuando en tus ojos anida
la fiebre de mi fiebre sobre tu mirada.
Como una góndola tu cuerpo se mece
yo soy esas aguas de tu navegar
en tu cuerpo la lujuria explotando crece
y en el mío se produce una tempestad,
La penumbra de tus sueños como sol se enciende
yo prendí la chispa de amor y pasión
temblando tu cuerpo pleno de placeres
encendiste la ternura en mi corazón.
Conjugamos abrazos, invocamos a los dioses
de vivir aventuras inventadas o soñadas
pero nunca quisiera despertar y no verte
junto a mi en la cama, una madrugada.
Ángel Reyes Burgos
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