No se si llegará ese díaen que mi alma llore de amor desconsolada
cuando mire en mis ojos esa agonía
por no tener de tu ternura ni la mirada.
Si llega ese momento de lluvia en mis ojos
vuelve tu corazón a los días vividos
y en tu alma tendrás una razón para volver
pues la razón de tu vivir la tenias conmigo.
Dejaré siempre en el faro de mis costas
encendida las luces que guíen tu camino
una de amor y diez mil de esperanzas
las que nunca perdiste teniendo mi abrigo.
No habra oscuridad en nuestro futuro
el fuego de tu alma junto a mi arderá
no habrá mas lunas que lloren de pena
la luz de mi corazón te iluminará.
Y ya dejará mi vida
de llorar por momentos de olvido
porque sabrás que no habrá ninguna,
ninguna otra mujer en mis gemidos...
Ángel Reyes Burgos
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