Eres perversa y en tu perversión me arrastra
a un juego delirante de pasión y amor
te cubres de polvos de miel dorada
y de deseos ardientes en tu corazón.
Nuestra cocina está hecha para soñar
y en la mesa te tiendes para excitarme
yo que soy mendigo del verbo amar
a tu boca me acerco para besarte.
Que delicia cuando bajo por tu cuello
saboreando el dulzor que te recubre
y me encuentro con las guindas de tus senos
en lo alto de tus dos preciosas cumbres.
He llegado al centro de tu cuerpo
y beso con fervor tu ombligo divino
y tu te estremeces cuando lo beso
libando un chorrito de dulce vino.
Todo es dulzura en tu cuerpo amado
y la perversa lujuria que a mi te ata
y en tu cuerpo de fuego tan deseado
ganaré con gemidos las mil batallas.
2 comentarios:
Excelente piesia , felicidades
Muchas gracias anónimo por tu visita y comentario, feliz día.
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