Sobre el follaje de hierba verde
voy a sentarte en mi cintura
y con mis manos que son rebeldes
saciaré las ansias de esta locura.
Al ritmo que mece el viento al trigo
deslizaré tus caderas sobre mi cuerpo
y la noche y la luna serán testigos
de mis suspiros de amor, cuando te tengo.
Mi éxtasis llega cuando besando
tu plantas los labios sobre mi boca
y la oscura noche nos esta mirando
y tu cuerpo tiembla como una hoja.
Tus temblores contagian todas mis ganas
y en mis ganas hay tormentas de puro fuego
cuando tu bajas y sube como una noria
llevándome a la culminación, de mis deseos.
Y la luna se ha puesto más pálida
y todos los pájaros alzan el vuelo
la luna cuando contempla tu mirada
y los pájaros, para contemplarte desde el cielo.
Ángel Reyes Burgos
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