Estas en mis pensamientos, al recordarte en cada uno de mis latidos que anhelan estar a tu lado, en cada uno de los suspiros exhalados al viento, en cada temblor de mis labios producidos por el frío de mis solitarias noche, sin el cálido abrigo de tu cuerpo.
Estoy acostumbrado a despertarme y buscar instintivamente con una mano el roce de tu piel y los huesos se me hielan al no encontrarla y a veces, una lágrima buscando la almohada rueda, por mi mejilla, por mi tristeza hueca, por los sueños que no te sueñan, por mi soledad austera...
La habitación esta vacía...no hay estrellas que alegren la noche de mi corazón, solo tu presencia y tus palabras serán la alegría que mitigaran mi pena. Como extraño tu esencia, tu tacto y tu sabor, ese aroma inconfundible que siempre dejas en mi piel, al hacer el amor...
Hoy será ese día, en que se realizará el milagro de que tu estés aquí sin tu presencia para brindar por la vida, realizando los sueños de la esperanza de tenerte junto a mi vida mía sin notar tu ausencia, porque dentro de mi alma, tu te fundirás con mis pensamientos y en ella te quedarás.
Este amor nuestro ya no necesita cuerpos, solo un ideal...el de contemplar el ciclo de la vida junto a ti hasta que llegue ese momento en que de nuevo extienda mi mano sobre la cama para encontrarte...
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