Con tu sangre y con mi boca,
los dos poderes más fieles.
Siembra flores en mi tierra
que renazcan de mi vientre
los hijos de la riqueza.
Ser ruiseñor en tus manos,
que me derrumbe en flaqueza,
siembra risa a mi tristeza
aunque lleguemos ancianos.
Junta ansías y las mías
con igual metal de llanto,
dos corazones en sangre,
una luz y un mismo manto.
Uncidos,un mismo yugo,
dos pilares y una raza,
dos huracanes de orgullo
una brisa de esperanza.
Dos pasiones y una sombra,
amanecer de templanza
con un sólo, hueco en la cama.
Dos volcanes y una calma.
El comienzo de una historia,
el orgullo de una casta,
el azúcar de una salsa,
con la sal de la guitarra.
C.Róman (© Derechos Reservados)
No hay comentarios:
Publicar un comentario